sábado, 13 de octubre de 2012

ANGEL GARCÍA LÓPEZ, 1935

De cuando nos nevaba y te reías
Llueve la nieve y llueve en tu mirada.
La nieve nieva y llueve tan deshora,
que a tus ojos, tan negros, los decora
de una pequeña ruta de nevada.

Está nevando nieve enamorada.
La nieve por tus ojos se enamora
nevando tu mirar, que nieva y llora
la aurora del nevero deshojada.

Te ha nevado la voz, y, de repente,
tu risa abre a la tarde la alegría
saltando de tu boca como un copo.

Me has lanzado una bola hacia la frente.
Y ha vuelto a sonreír tu niñería
mientras beso tu risa y te la arropo.


ANGEL GARCÍA LÓPEZ.  Nacido en Rota (Cádiz) en l935.

De cuando no sabía las letras de tu nombre...
Porque tu nombre estaba todavía
sin estrenar los labios, porque era
un acertijo más, una pulsera,
un trino de gorrión que no sabía.
Porque tu nombre estaba como un día
sin pájaros, oasis sin palmera,
fuente que le faltaba torrentera,
risa que no encontraba la alegría.
Por esto, por tu nombre; porque estaba
sin decir, sin hacer, como un anillo
que no encontraba el cauce de su dedo,
yo te llamaba Espera; te llamaba
Hermosa, Emilia, Amor; lo más sencillo,
lo más desenredado del enredo.




No hay comentarios:

Publicar un comentario